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 Asia, África (especialmente el sur del continente) y Europa Oriental son las zonas más afectadas por la Tuberculosis Es otra de las enfermedades más peligrosas del mundo. Considerada la segunda causa de muerte por infección. Es muy contagiosa ya que se transmite por el aire, lo que la hace aún más peligrosa. Sin embargo, si es diagnosticada a tiempo es curable mediante antibióticos, siendo más efectivos en adultos que en niños. La tuberculosis llega a unos niveles inimaginables para el mundo occidental. Se cree que un tercio de la población está infectada por esta enfermedad, en muchos esos casos se encuentra en un estado latente, es decir, que el paciente no manifiesta ni padece los síntomas de la enfermedad, pero es portador de ella. Afección bastante extendida en países subdesarrollados. Por ello se recomienda vacunarse cuando se viaje a África, centro y Sudamérica, Oriente Medio y el Sudeste asiático. La Fiebre tifoidea
El riesgo está asociado a las malas condiciones higiénicas en la preparación y manipulación de los alimentos, con el control de la calidad del agua potable o mediante el contacto directo con heces contaminadas, al tomar crudas las frutas y/o verduras fertilizadas con excrementos humanos o por la leche y los productos lácteos contaminados. Las moscas pueden contaminar los alimentos. Enfermedad infecciosa producida por una bacteria llamada Salmonella Typhi. El microbio entra en nuestro organismo y nos puede causar altas y prolongadas fiebres. Aunque esta enfermedad se puede adquirir en cualquier lugar del mundo, el riesgo es alto si se viaja a zonas del norte y oeste de África, en el subcontinente Indio, Sur de Asia, algunos países de América del Sur y en aquellos destinos donde existan microorganismos resistentes a antibióticos. Entre la formas de prevención contra este microbio está la vacunación al menos 2 semanas antes del inicio del viaje. Se recomiendan tres dosis por vía oral, en tres días alternos; así como vacunarse cada 3 años si el riesgo continua. Cabe destacar que la vacuna protege frente al riesgo de infección relacionado con la Salmonella typhi, pero no protege frente a otras especies de Salmonellas. Las personas que presenten problemas médicos que contraindiquen la administración de esta vacuna, así como las personas que puedan tener contraindicaciones a los componentes de la vacuna no deben aplicársela. Tips preventivos: Hervir o purificar el agua con tabletas de purificación, de preferencia beber agua embotellada y sellada de fuentes confiables, evitar marcas que no reconozcas. Usar sólo hielo que provenga de agua embotellada o hervida, evita el consumo de paletas heladas o los helados de sabores. Comer alimentos sólo cocinados completamente y que se sirvan calientes, evitar todas las frutas o vegetales que no hayas pelado tú mismo, no a los alimentos o bebidas de vendedores callejeros y lavarte las manos frecuentemente. Fuentes: https://www.passporthealthglobal.com https://www.msn Autor:Ere Luna.T.C. |
Viajes al extranjero, vacunas. Parte II | Viajes al extranjero, vacunas. Parte IV
