México es un país afortunado por toda la riqueza natural y cultural que tiene, es una parte del mundo que ofrece diversidad de escenarios, ideales para
practicar diferentes alternativas turísticas, en relación a ello, te mostramos las más populares y alguno que otro tipo que va aumentando su auge. Este tipo de turismo esta muy asociado con la determinación y una buena dosis de adrenalina ya que abarca el descenso de ríos, rapel, parapente, paracaidismo. Actividades en las que al mismo tiempo se puede conocer y admirar la flora y fauna de los sitios en donde se practica, es por ello que también se relaciona con el ecoturismo. En México hay una amplia variedad de sitios donde practicar el turismo de aventura, como por ejemplo Jalcomulco (Veracruz), los rápidos del río Copalita (Oaxaca), Barrancas del Cobre (Chihuahua), Agujero de las Golondrinas (San Luis Potosí), Cascada Cola de Caballo (Nuevo León). En este apartado se toma en cuenta a los turistas que practican algún deporte y también aquellos que solamente son espectadores. Algunos ejemplos del turismo deportivo son los maratones, el triatlón, la pesca deportiva, motonáutica, buceo, ciclismo de montaña, carreras de autos y vela. Cabe mencionar que los partidos de béisbol, fútbol así como los campeonatos de golf entran en esta categoria. Desde luego que nuestros país tiene los escenarios idóneos para practicar este tipo de turismo. Tan sólo para el buceo y la pesca deportiva están la Riviera Maya, nayarita, los Cabos y el Parque Nacional Cabo Pulmón en Baja California Sur. Están también la Laguna de Bacalar, Bahía de Banderas, Puerto Vallarta, Mazatlán; partícularmente para la práctica de la motonaútica se apunta Cancún o Ciudad del Carmen en el estado de Quintana Roo. Turismo de NegociosEs un rubro muy desarrollado en México. Se trata de la organización de diversos eventos al mismo tiempo que se dan a conocer los atractivos turísticos del lugar. Congresos y conferencias aunadas a tours. Por ejemplo es muy común asistir a un congreso en la Ciudad de Guadalajara o en la Ciudad de México y en los ratos libres pasear por la ciudad para conocer sus atractivos arquitectónicos civiles y religiosos, plazas y museos. Turismo CulturalComo su nombre lo dice, este es un tipo de turismo que se enfoca en dar a conocer los atributos culturales de ciudades y especialmente de pueblos pequeños pero muy ricos en historia y tradición. Muestra ritos, música, bailes, vestimenta desde antes de la conquista y luego en conjunto con las tradiciones que trajeron los europeos. Algunos ejemplos muy populares son la Guelaguetza en el Estado de Oaxaca o los Parachicos de la Fiesta Grande en Chiapa de Corzo. Desde luego estos lugares además de sus fiestas populares tienen atractivos arquitectónicos que van desde lo prehispánico hasta iglesias e interesantes museos. Aquí entran ferias y festivales literarios como las casas donde vivieron importantes personajes de diversas artes o bien aquellos lugares que fueron locaciones de grandes películas (turismo cinematográfico). El turismo cultural es tan amplio que también incluye el turismo funerario. Se trata de personas que viajan a diferentes lugares para visitar las tumbas de personajes famosos y que se distinguen por la belleza de sus mausoleos. Un ejemplo de ello es el Panteón San Fernando, en la Ciudad de México, ahora convertido en museo. Aquí descansan los restos de grandes hombres de la historia de nuestro país. El más visitado es la tumba de Benito Juárez, quien está enterrado en un mausoleo familiar junto a su esposa y cinco de sus doce hijos. Dirigiéndonos al centro del país, más específicamente en el Estado de Guanajuato, nos vamos hacia Dolores Hidalgo, allí encontraremos el cementerio donde fue enterrado José Alfredo Jiménez y cuyo mausoleo tiene la forma de un gran sombrero de charro. Es un sector con gran auge en algunas partes del mundo, esto se debe quizás a que resulta ser un turismo más fiel al sitio de visita. Tipo de viaje que involucra sentimientos de esperanza, agradecimiento, convivencia, acercamiento a nuestra creencias religiosas. Sus destinos abarcan visitas a santuarios o lugares sagrados de manera independiente, en grupo o peregrinación; visitas a tumbas de santos, participación en celebraciones religiosas, etc. Algunos ejemplos son los grandes viajes de los cristianos a Tierra Santa (Jerusalén y otros lugares) o los musulmanes a La Meca. A nivel nacional esta la peregrinación a la Basílica de Guadalupe en Ciudad de México, principal santuario de América Latina. Esta tambié la Ruta del Peregrino, que tiene como punto final el Santuario de la Virgen de Talpa en el Pueblo Mágico de Talpa de Allende en el Estado de Jalisco. La peregrinación hacia el Cristo Roto en Aguascalientes o al Santuario de San Juan de los Lagos también en el Estado de Jalisco. Un enfoque turístico para los de buen diente, personas a las que les gusta vivir experiencias culinarias muy relacionadas con regiones, pueblos y especialidades gastronómicas. En nuestro país se han estructurado las Rutas Gastronómicas en México, las cuales comprenden 18 recorridos turísticos por los diferentes estados, éstas fueron diseñadas para dar a conocer los sabores nacionales a partir de sus tipícos platillos. Algunos ejemplos son: los Fogones entre Viñas y Aromas del Mar que comprende los estados de Baja California y Baja California Sur, la Cocina de dos Mundos en el estado de Chihuahua, Puebla y sus diferentes tipos de moles, el recorrido del queso y el vino por el Estado de Querétaro; un paseo por las regiones vitivinícolas de México (el Valle de Guadalupe) y muchos más. México es un país asombrosamente rico en este giro turístico. Por mencionar algunos ejemplos están los vestigios de la civilización maya en las pirámides de Chichén Itzá (Yucatán), Palenque (Chiapas) y Tulum (Quintana Roo). Los apasionados por la civilización zapoteca viajan a Teotihuacán, Monte Albán, Yagul, San José Mogote, Zaachila y otros sitios arqueológicos. Este tipo de tursimo es muy benéfico tanto para los turistas, quienes viajan, gastan y aprenden como para las familias que viven cerca de los yacimientos arqueológicos, quienes se sostienen económicamente hablando, de los ingresos que deja el turismo, los cuales también son de utilidad para la conservación de estos lugares. Es un efoque turístico dirigido a las personas que buscan su bienestar fisico, mental y espiritual. Generalmente son turistas que visitan sitios con aguas termales, para ello, aquellos lugares que originalmente fueron pozas de agua caliente para bañarse se han transformado en verdaderos spa con expertos masajistas, temazcales, baños de lodo, etc. con fines medicinales y estéticos. Algunos sitios mexicanos que cuentan con aguas termales son los Azufres y Agua Blanca en el Estado de Michoacán; Tequisquiapan en Querétaro; Ixtapan de la Sal y Tolantongo (Estado de México); La Estacas, Agua Hedionda y Los Manantiales en Morelos y El Geiser (Hidalgo). Esta enfocado a las personas que se sienten sofocadas por las metropolis y andan en busca de lugares más tranquilos y pequeños para descansar, asi que viajan a pueblos y aldeas que ofrecen un contacto más directo con la naturaleza y donde se distribuyen productos agrícolas y pecuarios cultivados y criados de manera tradicional. Este rubro al igual que otros es un ganar-ganar, ya que por un lado los turistas logran relajarse y distraerse mientras que los locales se benefician de los ingresos por alojamiento y consumo en general de los visitantes. El turismo rural esta muy relacionado con otros tipos de turismo como por ejemplo el agroturismo, ecoturismo, turismo cultural, religioso, de aventura, deportivo, tecnico-científico, educativo, de la salud, gastronómico. El tamaño del poblado o la aldea no limita sus servicios, ya que cuentan con restaurantes, tiendas de artesanías, tours por lugares emblemáticos, presentación de eventos culturales y folklóricos, todo enfocado para el disfrute de quienes los visitan. Algunos ejemplos son la Bahía de los Ángeles en Baja California o bien San Pedro Atlapulco, Milpa Alta, Xochimilco, Tláhuac y Tlalpan en la Ciudad de México; Hotel Rancho el Morrillo y Rancho Tío Tacho en Coahuila. Quienes lo practican son turistas especialmente preocupados por la preservación del medio ambiente y con frecuencia participan o colaboran con organizaciones ambientalistas. Tiende a realizarse en áreas poco perturbadas por el hombre con el fin de disfrutar, apreciar y estudiar tanto sus atractivos naturales (paisajes, flora y fauna silvestres), como las manifestaciones culturales que allí puedan encontrarse. Algunos ejemplos son el Pueblo Mágico de Angangueo en Michoacán, un sitio donde se puede admirar millones de mariposas Monarca en su migración anual hacia el sur. Por otro lado tenemos la costa del Pacífico para ver la migración de las ballenas y la liberación de los tortuguillos criados en cautiverio o que tal los santuarios del flamenco rosa en Yucatán, definitivamente un espectáculo sin igual. Hoy en día el viajar con el fin de ver las estellas con mayor nitidez se ha vuelto una nueva modalidad turística. Y es que para observar el cosmos no cualquier lugar es el idóneo; este debe contar con ciertas condiciones como aquellos lugares alejados de los centro urbanos, donde las luces artificiales impidan observar a detalle los cuerpos celestes. Otro elemento importante es la altura, pues a mayor elevación, el viento ayudará a que el cielo esté despejado y las noches sean mucho más claras. La Fundación Starlight certifica los mejores puntos de observación del cosmos en relación a la ausencia de iluminación artificial y del número de noches despejadas al año. Debido a su extensión territorial y distintas altitudes, Starlight contempla a México como uno de los países donde se puede observar con mayor nitidez el firmamento. Dos sitios idóneos son el Parque Nacional San Pedro Mártir en Baja California y Wirikuta en San Luis Potosí. Fuentes: |