Declarado como Pueblo Mágico en 2023, este es un lugar que invita al disfrute tranquilo que se aprecia al recorrer sus calles, llenas de vegetación que convive con la arquitectura donde la huella francesa es parte del paisaje. Esto se debe a la instalación de la compañía "El Boleo" en el año de 1885 por los franceses, quienes asombrados por la abundancia del cobre en la región obtuvieron una concesión del Presidente Porfirio Díaz para extraer el material. Santa Rosalía es la puerta de entrada al municipio más grande del Estado de Baja California Sur: Mulegé, un sitio lleno de riqueza natural y cultural incomparables. Lugar único situado en una de las joyas mexicanas donde se conjugan tradiciones y costumbres añejas, su ubicación geográfica es al norte del estado. Un poco de historia de Santa RosalíaEl primer europeo que exploró todo el golfo de California y sus litorales fue el navegante Francisco de Ulloa, en 1539. En 1701 el padre jesuita Juan María de Salvatierra exploró la región, cuatro años más tarde el padre jesuita Juan de Basaldúa fundó la Misión de Santa Rosalía de Mulegé. En 1868 un cargamento a nombre de alguien llamado José Rosas Villavicencio llegó a Guaymas, era un extraño mineral verdoso que abundaba en una zona despoblada en la costa opuesta del Mar de Cortés, tras ser analizada en un laboratorio se descubren que es cobre de muy alta pureza; la noticia de un yacimiento atrajo la atención de unos caballeros de origen Alemán, llamados Blumhart y Julio Muller, que rápidamente contactaron con Villavicencio para que los acompañara en una expedición y certificaron de la abundancia del mineral en la región de Santa Rosalía, estos volvieron a Europa para pedir financiación a la Casa Rothschild, estableciendo inicialmente la compañía Eiseman y Valle en 1873, con sede en Guaymas con la intención de explotar los yacimientos. Estas explotaciones eran primitivas: se cargaba el mineral de la superficie tal como se encontraba en los barcos para ser procesado en Cananea. Para 1879, las fluctuaciones del precio del cobre y las estas técnicas rudimentarias de explotación provocaron el quiebre de la compañía. El entonces presidente de México, Porfirio Díaz, otorgó una nueva concesión a una compañía francesa y ésta compró la anterior con un millón de pesos oro. El contrato se firmó el 7 de julio de 18858 fundándose la Compagnie du Boleo. La concesión minera se denominó ''Distrito Minero Santa Águeda'', el cual abarcaba desde Santa Rosalía hasta la actual Mulegé; una comisión en 1888 aseguró que empezando explotación continua del cobre habría suficiente para cincuenta años de extracción, por lo tanto a la compañía Boleo se le exentó de impuestos de aduana de sus embarcaciones por el mismo periodo de tiempo. Para 1890, el ferrocarril usado en el transporte del mineral abarcaba 38 km y se procesaban hasta 100 toneladas de mineral de boleíta.8 Durante el tiempo que la compañía francesa El Boleo, S.A, construyó casas, iglesias y escuelas en el estilo francés de la época, tanto para las familias de sus funcionarios y técnicos, como para las familias de sus obreros. Se considera que es segunda población de México en tener electricidad, después de Ciudad de México, pero en este caso no se usaba para iluminación de calles sino para las bombas de acueductos de agua potable, de origen suizo de una empresa llamada Oerlikon. Las oficinas del centro de gobierno fueron construidas en 1897 en un estilo colonial tropical francés, tomando como base los planos del ingeniero Gustavo Eiffel. Las construcciones que fueron las oficinas de la compañía El Boleo S.A. fueron diseñados siguiendo la arquitectura colonial francesa tropical la cuál era muy común en aquella época, al igual que el hotel Francés, fueron construidos en ligera madera. Ya en 1938 se cumplían los cincuenta años predichos para la explotación del cobre dónde inevitablemente la producción del cobre decae, se abren pozos más profundos que los existentes y se extraen varias vetas de manganeso pero esto no resultó rentable. La Segunda Guerra Mundial y posguerra fue el impulso que recibió Compagnie du Boleo que permitió subsistir en sus últimos años. En 1954 la compañía francesa cierra operaciones en el poblado al considerar agotados los yacimientos, lo que provoca un éxodo de habitantes. Ante esta situación, el Gral. Agustín Olachea Avilés, Gobernador de Baja California Sur (1946-1956) promovió con el apoyo de la Comisión Nacional de Fomento Minero, la formación de una empresa de capital mixto, que permitiera la subsistencia de dicha mina, con lo que se reinicia la explotación minera que concluye en 1972 al haberse agotado los yacimientos. El 5 de diciembre de 1986, se emite un decreto presidencial en el cual es declarado al pueblo minero de Santa Rosalía, "Zona de monumentos históricos", que incluye 32 inmuebles históricos muchos de ellos de arquitectura francesa "boleriana" muy tradicional, dentro de 135 manzanas, en un perímetro de La parte antigua, la zona centro y la Mesa Francia; entre los edificios está la Iglesia de Santa Bárbara, edificada por Gustavo Eiffel, así como el Palacio Municipal, Archivo y Museo histórico, La misión, la biblioteca Mahatma Gandhi y el hotel francés. Sitios para visitar en Santa RosalíaParroquia de Santa Bárbara: su edificación se atribuye al famoso Gustave Eiffel, ingeniero civil francés, conocido por su proyecto estrella:la Torre Eiffel en París, Francia. La estructura de metal prefabricada fue colocada en su sitio a finales del año 1897. La compra la realizó la compañía minera El Boleo. Su diseño se realizó en 1889 y fue para la Exposición Universal en París. Su llegada a México no es clara, pues se cree que está aquí por un error, que su destino era otro. Un estudioso del renombrado ingeniero señala que todo lo que está realizado en "metal noblemente labrado" solía atribuírsele. Sin embargo, ya han sido varias las obras que resultan no ser de él. Los techos son de lámina y las paredes a base de placas embutidas fijadas con pernos. Destacan sus vitrales, delicados y detallados, de colores azul y marrón, además de las imágenes religiosas que vale la pena admirar. Es considerada por el Instituto Nacional de Antropología e Historia como Patrimonio Histórico de la Humanidad, lo que llena de orgullo a los habitantes de la localidad. Ubícala en el km 73 km al este de San Ignacio, por la carretera Núm.1. Museo de Historia de la Minería de Santa Rosalía: un sitio que se presta para entender la historia de esta población y conocer detalles y piezas de la época en que los personajes franceses dieron forma a este pueblo, así mismo rescata todo lo referente a ese auge minero, la etapa floreciente del pueblo. En la sala acondicionada para su exhibición, podrás apreciar equipo y piezas de inicio del siglo XX. A la entrada podrás apreciar El Trenecito, una pequeña locomotora utilizada antiguamente en las minas. En la sala que se acondicionó para su exhibición se pueden apreciar mobiliario, equipo y piezas de inicios del siglo pasado en un edificio original de la época, con lo que te transporta a otra época y ahí dentro verás que también a un sitio que sólo imaginábamos en las películas. El museo abre de lunes a viernes de 08:00 a 15:00 hrs; el sábado y el domingo el museo permanece cerrado. El costo para el acceso es voluntario. Plaza Benito Juárez: llena de coloridas flores de bugambilia, podrás admirar su quiosco de estilo francés, adornado por gárgolas en cada una de sus esquinas. Esta plaza de armas se ubica en el centro del Pueblo, frente al Palacio Municipal y a un costado de la iglesia Santa Bárbara. Precisamente en la colonia llamada Mesa México, sitio destinado para las familias de los trabajadores mexicanos que trabajaban en la mina El Boleo, te encontrarás con esta plaza. Aquí también encontrarás diversos restaurantes a los que los locales y visitantes se dan cita para probar las delicias que Baja California Sur ofrece. Panadería el Boleo: desde 1901, el año de su fundación, este establecimiento hornea ininterrumpidamente pan de diversas formas y sabores, entre dulces y salados, para la alegría de sus visitantes. Es un establecimiento de madera, otro de los ejemplos de arquitectura francesa de la región. La panadería la fundó la compañía minera El Boleo, empresa que explotó aquí las minas de cobre. Su función era abastecer de pan tanto a los franceses que operaban la compañía como a los trabajadores de la mina. Al inicio los ingredientes llegaban desde Francia, posteriormente se importaban de Estados Unidos. En la actualidad, es un negocio familiar, que atienden la tercera y cuarta generación. Entre las evoluciones de su producción panadera está el uso de ingredientes 100% mexicanos. Sin embargo, El Boleo aún utiliza los hornos de leña y los anaqueles con los que se inauguró. Cuando visites este lugar no te vayas sin probar varias de sus deliciosas creaciones, entre los favoritos están las conchas, las empanadas de cajeta, las arepas, los bolillos y las pitahayas, nombradas así por su parecido con la fruta. Parque José María Morelos y Pavón: donde podrás visitar la Biblioteca Mahatma Ghandi, la locomotora de la ex fundidora y el volumétrico de Santa Rosalía, las letras para tomarte la foto del recuerdo. Este es uno de los rincones más pintorescos y bellos del Pueblo Mágico que no pueden faltar en tu itinerario. Atractivos naturales de Santa RosalíaIsla de San Marcos: la isla está situada a 5 km de la península de Baja California. Este hermoso lugar lo encontrarás en el municipio de Mulegé. Para acceder a ella se debe zarpar desde el pueblo de San Bruno, a 17 kilómetros al sur de Santa Rosalía. Aquí podrás apreciar el inmenso azul del Mar de Cortés y poner en práctica tus habilidades en snorkel, kayak y buceo, ya que hay una gran variedad de especies marinas y bancos de arrecife para admirarse con su singular belleza. Entre las especies que podrás conocer aquí, están el cazón y el tiburón. También es posible admirar las minas de yeso de la isla, la segunda más grande en el mundo, cuya actividad está activa. No hay servicios públicos porque no se trata de un lugar que se sostenga del turismo. Sólo lo habitan las 260 personas que, de una u otra manera, se encuentran vinculados a las minas. Por lo mismo, es recomendable hacer la visita en auto, pues no hay servicios de transporte que puedan llevarte hasta aquí. Complejo de volcanes tres vírgenes: es uno de los atractivos naturales de Santa Rosalía, se encuentra alejado, a más de 30 kilómetros. Este complejo se forma de los volcánes: El Azufre, El Viejo y el más prominente de los tres, La Virgen. Los tres volcanes forman parte de la Reserva de la Biosfera Desierto de El Vizcaíno. Es de resaltar que esta región es de gran importancia ecológica y geológica, ya que constituye el hábitat de especies amenazadas, únicas en el mundo. Entre los que pueden apreciarse están el cirio, el datilillo y el borrego cimarrón. La zona volcánica es una importante fuente de energía geotérmica que se genera en las entrañas de la tierra, a miles de metros de profundidad. Desde aquí fluye la energía hacia Santa Rosalía y San Ignacio. El volcán de las Tres Vírgenes es muy poco visitado, sólo atrae a quienes son amantes de la aventura y la exploración, como científicos, cazadores, excursionistas, montañistas y alpinistas que escalan hasta la cima pues la recompensa de esa hazaña es la incomparable vista que regala del Mar de Cortés. En el ejido Bonfil puedes conseguir guías para ascender el volcán, pero se debe pedir información y autorización a la Estación Biológica de la Reserva de El Vizcaíno en Guerrero Negro o bien visitar la pequeña estación biológica del Borrego Cimarrón, cercana a la ranchería de las Tres Vírgenes. GastronomíaEs una mezcla de influencias; desde los primeros cazadores y pescadores, las misiones jesuitas y más tarde los pobladores franceses, hasta llegar a la tradicional cocina mexicana del noroeste, basada principalmente en frutos del mar como almejas, calamares y pescados. Fuentes: |